Los hospitales y centros de la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM) manejan conforme a la legislación y normatividad vigente los Residuos Peligrosos Biológico Infecciosos (RPBI) que generan mediante el servicio de atención médica diariamente, es decir que separan los residuos sólidos urbanos (basura común), de los RPBI para posteriormente entregarlos a una empresa autorizada por la SEMARNAT, para la recolección, tratamiento y disposición final y con ello evitar daños a la salud y contaminación
A través de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS) se trabaja en el proyecto de Residuos Hospitalarios en el Departamento de Evidencia y Manejo de Riesgos y tiene como actividades principales la supervisión en unidades médicas de la dependencia y la capacitación constante al personal.
En promedio se realizan 20 cursos al año sobre el manejo adecuado, la separación y envasado de los RPBI.
La responsable del programa de RPBI de la Coepris, Patricia Bautista Guzmán se encarga de supervisar los hospitales y centros de salud generadores de residuos peligrosos, para verificar que sean separados adecuadamente y que reciban un tratamiento adecuado para su disposición final.
En promedio los hospitales y centros de salud de la SSM generan y dan disposición final de manera correcta a un promedio de 15 toneladas de RPBI mensualmente y el personal de manera anual también es capacitado en la materia, para la correcta separación, almacenamiento y disposición final de estos desechos peligrosos.
De igual manera, se les brinda asesorías sobre la recolección al interior de las unidades médicas, en un carro recolector exclusivo para los RPBI y usando equipo de protección personal en horarios establecidos.
Los RPBI deben encontrarse en un almacén temporal dentro de la unidad médica, para mantener los residuos en condiciones que marca la Norma Oficial Mexicana NOM-087-ECOL-SSA1-2002, Protección Ambiental, Salud Ambiental y Residuos Peligrosos Biológico-infecciosos, la cual establece que la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) a través de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), son las responsables de vigilar que los generadores cumplan con todas las disposiciones.
Dentro de las acciones de vigilancia regular de la COEPRIS, también se encuentra la de verificar que los hospitales públicos y privados contraten a empresas autorizadas para la recolección, tratamiento y disposición final de los residuos peligrosos, ya que éstos no deben disponerse en los rellenos sanitarios.
La SEMARNAT, otorga la Licencia Ambiental Única, para el funcionamiento de las empresas dedicadas a la recolección. Tratamiento y disposición final de los residuos peligrosos. Sin esta licencia no deben brindar dichos servicios.
La PROFEPA ejecuta las sanciones que establece la Ley de Gestión Integral de Residuos a unidades médicas que no cumplen con lo que dicta la normatividad vigente de RPBI y que no les dan disposición final a los mismos a través de una empresa dedicada a ello.