Deberán atender a las zonas con más alto grado de conflicto y actualizar los datos del Padrón Único de beneficiarios, entre otras actividades.
Morelia, Michoacán, a 18 de julio de 2019.- A los ‘superdelegados’ solo les falta vender mole los domingos.
De acuerdo con la publicación en el Diario Oficial de la Federación, los delegados federales o ‘superdelegados’, como se les conoce tras la desaparición de las delegaciones federales en este gobierno, deberán seguir los casos respecto a la atención en los módulos de operación y dar atención a las personas en zonas indígenas, entre otras obligaciones.
También, los llamados ‘superdelegados’ podrán cordinarse con las secretarías para dar seguimiento a los programas sociales que deberán entregarse de manera directa.
En el caso de Michoacán, el ‘superdelegado’ federal es el morenista Roberto Pantoja.
Los ‘superdelegados’ deberán proveer la información necesaria para la implementación de los programas de desarrollo, atender a personas en alto grado de marginación y zonas con alto nivel de violencia e integrar el padrón de beneficiarios de los programas federales.
“Realizar acciones que permitan la identificación de los beneficiarios de Programas para el Desarrollo y la localización geográfica de las necesidades de la población; promover el establecimiento de los módulos de atención, para la atención de la población beneficiaria de Programas para el Desarrollo; Apoyar en el combate efectivo a la pobreza, conforme las instrucciones que reciban de la Coordinación General y de la Secretaría”, explican las reglas publicadas hoy en el DOF.
Los funcionarios federales deberán también brindar asesoría a las oficinas de representación de las dependencias y entidades para mejorar la implementación y ejecución de los Programas para el Desarrollo, así como a las autoridades de los estados de la República, municipios y las alcaldías de la Ciudad de México, cuando éstas lo soliciten.