Los centros comerciales buscan ofrecer experiencias más allá del cine, con centros de spa y áreas de entretenimiento.
Las compras en centros comerciales se convierten, sobre todo tras el periodo de encierro pandémico, en puntos de encuentro que combinan la oferta tradicional con nuevas propuestas para los consumidores,; los centros centros de ocio integrales atraen cada vez a más personas.
En los últimos años, los centros comerciales han pasado por una transformación en su propuesta de experiencias. Desde cines, hasta pasillos gastronómicos, parques de diversiones, oficinas tipo cowork, bares, restaurantes, rooftops, canchas deportivas e incluso centros médicos, los shoppings ofrecen un abanico integral de soluciones para resolver múltiples necesidades de las personas en un mismo lugar.
Con la llegada de la pandemia y el boom del comercio electrónico, las tiendas físicas temían por su continuidad. En aquel entonces, se estimaba que un 25% de los locales y centros comerciales no volverían a abrir cuando se reiniciara la actividad, sin embargo, la recuperación fue inesperadamente buena e incluso los impulsó a reinventarse para adaptarse a la nueva coyuntura económica y social.
De acuerdo con Índice Pogen, indicador que mide la afluencia en centros comerciales y tiendas de venta al por menor a nivel nacional, señala que México mostró una recuperación de afluencia en los centros comerciales y tiendas del país del 78% y 86%, respectivamente.
“En los últimos años, los shoppings se enfrentaron al desafío de volver a cautivar a los consumidores, que desde la pandemia están mucho más digitalizados. Cada vez más centros comerciales incorporan propuestas innovadoras para adelantarse al tipo de demanda de la sociedad de hoy. Desde bares hasta restaurantes de categoría, cines y oficinas, la oferta refleja un cambio de paradigma sobre el concepto de shopping tradicional. Esto representa una gran oportunidad para los retailers que buscan atraer clientes a sus tiendas físicas, pero sin dudas, deben esforzarse en que la experiencia de compra sea excepcional”, explica Martín Malievac, director de Investigación y Desarrollo de Napse.
La reconversión de los shoppings a centros de experiencias es una realidad que va de la mano con el cambio sociocultural de consumo y, sin dudas, es una estrategia que los datos confirman su éxito. Según datos, el inventario de centros comerciales con una superficie mayor a 10 mil metros cuadrados (m²) incorporó cerca de medio millón de metros nuevos. Esta cifra, simbolizó un aumento del 2.1%
Indudablemente, el mix de centros comerciales seguirá en aumento, tanto para adaptarse a la realidad omnicanal como a los nuevos hábitos de los consumidores.
Martín Malievac, describe varias tendencias para el futuro del shopping, que son la conjugación de las tiendas físicas como apoyo logístico y los modelos entre lo físico y lo digital y también las experiencias.
En el caso de las tiendas físicas como apoyo logístico, sucede que la configuración de la tienda como pick up point (punto de retiro) se consolida como una modalidad cada vez más recurrente.
Se trata de compras que comienzan online que terminan en el local. A los usuarios les brinda comodidad y resulta más económico que el envío. Sin embargo, para que estos funcionen correctamente, resulta fundamental contar con soluciones de integración de los canales físicos y digitales, lo que se conoce como omnicanalidad.
En el caso del modelo de tiendas phygital está centrado en la experiencia del consumidor y busca que esta sea cada vez más personalizada. Propone que la parte offline y online de la empresa se encuentren y trabajen conjuntamente, creando una interacción más profunda y satisfactoria con el cliente. De esta manera, entra en juego la colaboración entre los diferentes canales del negocio, para lo cual es necesario contar con un sistema de gestión que los integre para un correcto desarrollo.
En relación a los centros comerciales como experiencias, la inversión en propuestas innovadoras dentro de los centros comerciales seguirán en aumento: gimnasios, centros médicos, áreas gastronómicas, parques de atracciones, así como los supermercados y bares, serán cada vez más frecuentes.