La UNESCO y la Fundación Banorte presentaron en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, los resultados de un proyecto con lecciones para que los programas destinados a la mejora de la calidad de vida de las personas cumplan sus objetivos de forma duradera y acelerar la reducción de las brechas de desigualdad.
La UNESCO en México, mediante su sector de Ciencias Sociales y Humanas, busca aportar evidencia y conocimiento científico social para permitir el fortalecimiento de programas de impacto social a través de herramientas innovadoras en favor del bienestar social de las familias mexicanas.
“En el proyecto participaron alrededor de 300 personas, mismo que incluyó entrevistas, grupos focales y reuniones en 10 municipios de Chiapas, Estado de México, Morelos, Puebla y Veracruz. La iniciativa documentó la experiencia de seis programas de impacto social de la Fundación Banorte, junto con recomendaciones que pueden aplicar otras organizaciones de la sociedad civil para impulsar a las comunidades a desarrollar sus capacidades, habilidades y generar un empoderamiento sostenible”, indicó la Fundación Banorte en un comunicado.
La UNESCO también fortaleció 47 indicadores y propuso 31 nuevos, con un enfoque directo en la realidad, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Nueva Agenda Urbana de las Naciones Unidas, para que la Fundación Banorte tenga una guía y objetivos claro para seguir trabajando con sus aliados estratégicos como: Hábitat para la Humanidad y Un Kilo de Ayuda, y responder así a las necesidades de las comunidades e impulsar su desarrollo.
“El trabajo demuestra que dejar de considerar a las personas como simples beneficiarias, sino reconocerlas como participantes activas, que toman decisiones y dirigen sus propias vidas, permite que los apoyos del tercer sector pasen a una transformación real y duradera, en los términos de las propias comunidades y que las iniciativas dejen de responder sólo a corto plazo”, dijo el representante de la UNESCO en México, Andrés Morales.
Hacen falta alianzas
Los resultados de la sistematización de los programas de impacto social de la Fundación Banorte demuestran y ponen en evidencia el valor de las alianzas para lograr el cambio social a favor de un futuro sin desigualdades e inclusivo para todas las personas.
El trabajo que se ha realizado en conjunto y cada organización, desde su ámbito y localidad, es un ejemplo claro del compromiso que tenemos como organización multilateral, como sector privado y como sociedad civil de encaminarnos hacia la meta en común que es el bienestar de las familias.
