Por Alfredo Juárez Maldonado
Con las reglas del juego definidas y el aval presidencial se anunció el banderazo de salida para saber quién ocupar la silla del águila en el próximo sexenio.
Los aspirantes a coordinar los comités en defensa de la cuarta transformación se encuentran en este momento recorriendo el país, para ganar la encuesta que definirá a la próxima o próximo presidente de nuestro país. En esta contienda podemos encontrar al Diputado Federal con licencia Gerardo Fernández Noroña, la exjefa de Gobierno de la CDMX Claudia Sheinbaum Pardo, el excanciller Marcelo Luis Ebrard Casaubon y los dos Senadores con licencia Ricardo Monreal Ávila y Manuel Velasco Coello, todos con amplia trayectoria profesional y experiencia política buscan ganarse el cariño y respeto de los mexicanos para dirigir los destinos de la nación.
De los antes mencionados, sobre sale un perfil atípico como es el compañero Noroña, quien con su particular forma de ser y actuar a sabido ganarse el corazón de miles de mexicanos de todas las edades y extractos sociales y es que Noroña, a su manera irreverente y con inteligencia a sabido sortear lo sinuoso del camino político para salir avante y sin ser el preferido del presidencialismo, recorre México y agita conciencias para profundizar la cuarta transformación, abrazando las cusas del pueblo y promoviendo la unidad de los mexicanos.
Al revisar un poco la historia de Noroña podemos encontrar que desde los inicios de su carrera política a la actualidad a luchado contra las injusticias y las malas prácticas de la clase política mexicana, motivado por sus ideales se posiciona como un aliado del pueblo en las causas justas y se platea un cambio de régimen que sea más justo para todos y por ello merece el beneficio de la duda y una oportunidad para demostrarlo.
El relevo presidencial es un tema que debe preocuparnos y ocuparnos a todos los mexicanos sin importar nuestras preferencias, estamos en la antesala de lo que será el próximo sexenio de la llamada cuarta transformación de la vida pública y el futuro de nuestra nación, es por ello se debe seguir con lupa este relevo. Sin duda serán unas semanas complejas y de arduo trabajo para todos los aspirantes, aunque también para todos los mexicanos, pero recordemos que: “Por el bien de todos primero es la Patria”.