Visiblemente molesto, el Padre Goyo (Gregorio López Gerónimo) habla sobre los dichos del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla acerca de que algunos integrantes del clero son voceros del crimen organizado.
“Hay eventos muy claros que no dejan mentir el hecho de que ya es un crimen y una bofetada al pueblo diciéndonos que todo está bajo un orden. Todavía el gobernador acusa al clero de que somos voceros de la delincuencia organizada, que estamos hablando a nombre de los delincuentes, cuando somos los únicos que estamos levantando la voz en contra la delincuencia”, afirma el Padre Goyo.
El sacerdote responde fuerte a los señalamientos del mandatario michoacano.
“Ofendido por los señalamientos no me siento porque no lo soy. Más bien eso le gana el mote, y le doy el honoris causa a Alfredo Bedolla, de pendejete y con posgrado en imbecilidad. Le doy ese título, pero no me siento ofendido, en lo más mínimo me he inmiscuido jamás con ningún grupo delincuencial. No trabajo en ningún partido. No ando en busca de un peso ni de un hueso, como lo hacen ellos. Ni un peso ni un hueso”, expresa el sacerdote en entrevista.
Los dichos del titular del Poder Ejecutivo del estado de Michoacán se dan tras el asesinato del fundador de los grupos de autodefensa en la Tierra Caliente, Hipólito Mora. De manera extraoficial se conoce que los criminales rociaron con gasolina el vehículo en el que viajaba para obligarlo a salir y entonces dispararle. Antes habían acribillado una camioneta con hombres que lo resguardaban y pertenecían a la Guardia Civil.
Tras los hechos de violencia, en la región se han presentado balaceras y cierres carreteros entre las localidades. Incluso, hay ataques con drones por parte de la delincuencia organizada para “distraer” el operativo policiaco que se desarrolla en esa zona.
“Está cada día peor. Hay una presencia militar exacerbada. Tenemos 1,500 militares en este momento, 400 de la Sedena, 600 de guardia nacional, 400 de guardia civil y 100 de la Fiscalía (estatal). Mil 500 y ayer nada más les tomaron siete puntos carreteros en torno a Apatzingán, hubo dos asesinatos y hoy mismo esta mañana en pleno campo o guerra campal en Las Caramicuas, cerca de Las Cruces. El sábado hubo un bombardeo con drones en la Presa del Rosario”, afirma el presbítero en entrevista.
Señala a mandos
El presbítero afirma que son los mandos policiacos los que están implicados con los cárteles en esa zona de Tierra Caliente, a los que dejan trabajar a sus anchas.
“Hoy te hago una denuncia pública. El jefe de jefes, el capo de capos, a nivel estado, se llama a Alfredo Arteaga Reyes, que es el jefe de seguridad estatal que Alfredo Bedolla tiene como su hombre de seguridad, y los secunda otro Arteaga, que se llama a José Arteaga, y entre ellos dos son los que tienen los nexos con los carteles unidos y con los carteles que paguen, con que paguen plaza son bienvenidos
El Padre Goyo afirma que su trabajo con la comunidad es lo que defiende de los señalamientos desde la conferencia del Poder Ejecutivo.
“Tenemos 125,000 víctimas que hemos ayudado a través de una asesoría legal para que ingresen en asilo humanitario a Estados Unidos. Hoy mismo estoy viajando a la frontera para atender un llamado en 14 albergues, que es urgente porque están saliendo curiosamente de la región de Tierra Caliente, van alrededor de 500 personas en lo que vale la semana pesada ah ahora, en una semana tenemos 500 personas que están llegando a los albergues y hay que ir a acomodarlos”, expolica el sacerdote.
El sacerdote considera que hoy la delincuencia está bien empotrada pero desde las instituciones.
“Que nos muestre a Alfredo Ramírez Bedolla que no tiene nexos con la delincuencia, le damos ese beneficio de la duda, que nos muestre que está con el pueblo, por el pueblo y para el pueblo. Le invitamos. Le exhortamos a que lo haga”, expone el sacerdote.
El sacerdote hace un llamado a una resistencia firme pero pacífica en la región, en la que tiene que imperar el orden impuesto desde la autoridad.
“Lo reto (al gobernado) a que tome en serio esto. No vamos a tomar armas. No soy partidario de tomar las armas como dice Lupe Mora Chávez. No. Lo apoyo. Pero yo lo invito que actuemos con la razón en una resistencia pacífica pero activa, no pasiva. Una desobediencia civil. Tomar las instituciones y sacar a toda la basura y estoy pidiendo que traigan escobas porque vamos ocuparlas para barrer toda la basura pestilente que hoy está en las instituciones de gobierno. Ineptas. Incólumes”, expresa el sacerdote católico.
“Hoy se necesita pasar a la etapa de la exigencia a la ley con el rigor de la ley sobre los delincuentes y hacer prevalecer el Estado de derecho, la soberanía del estado de Michoacán de Ocampo. Se trata no de algo que tú quieras negociar. No. La libertad no se negocia. La libertad no se vende. La vida no se pone al mejor postor y hoy nos tienen a los michoacanos en el mercado de la delincuencia, bajo el sicariato”, señala el Padre Goyo.
