Por Juan Pablo Celis
Hace unos días el ex gobernador Silvano Aureoles Conejo anunció su retorno a Michoacán. Este anuncio lo realizó a través de un breve video transmitido en el aniversario de su partido.
Silvano abandonó Michoacán en cuanto concluyó su periodo como gobernador y permaneció en el olvido argumentando estar con su familia. Lo cierto es que ahora que no tiene el control de la administración pública, están saliendo a la luz inconsistencias de su administración. Y desde, donde quiera que se encuentre, intenta incidir para no ser más investigado.
Recientemente vimos que en su administración hay miles de millones de pesos perdidos, la Unidad de Inteligencia Financiera investiga a él y su red de corrupción sobre los millonarios desvíos económicos. Mientras que también la Auditoría Superior de la Federación ha señalado irregularidades en más de 16 mil millones de pesos y el Congreso del estado encontró más en 6 mil 330 millones de pesos, correspondientes a la cuenta pública 2020.
El ex gobernador tiene muchas cuentas mochas que aclarar a las y los michoacanos, de ahí que sólo se apareció a través de un breve video en el que, además se le percibe cansado y avejentado, haciendo la promesa de regresar a Michoacán. La verdad no creo que regrese, al menos no, en los términos que él pretende, toda vez que tiene mucho que aclarar y responsabilidades a las que hacer frente, pues recordemos que las cosas están cambiando y ahora hay cero tolerancia a la corrupción.
