Había una vez, en la vibrante ciudad de Los Ángeles, una brillante visionaria llamada Ruth Handler que emergió como la creadora de uno de los juguetes más icónicos y perdurables del mundo. Profundamente apasionada por revolucionar la industria de las muñecas, Handler emprendió un viaje que cambiaría para siempre la noción del juego.
“Quien creó Barbie” es un cuento que arroja luz sobre la mente increíble que dio origen a esta muñeca emblemática. Ruth Handler, junto a su esposo Elliot, cofundó la renombrada compañía de fabricación de juguetes Mattel en 1945. Como madre devota y astuta empresaria, Ruth se encontraba observando continuamente a su hija Barbara y sus amigas participando en juegos imaginativos, a menudo representando varios escenarios de adultos.
Inspirada por estas observaciones, Ruth reconoció un vacío en el mercado para una muñeca que pudiera trascender los límites de los juguetes convencionales. En 1956, mientras estaba de vacaciones en Suiza, se encontró con una muñeca alemana llamada Bild Lilli, una figura atrevida y segura de sí misma. Instantáneamente cautivada por el encanto de Lilli, Ruth Handler vislumbró una oportunidad de crear algo realmente innovador.
Al regresar a su país de origen, Ruth llevó el concepto de Lilli al corazón de Mattel, aprovechando su espíritu emprendedor y determinación para ver su visión cobrar vida. Sin embargo, para hacer su creación más cercana y adecuada para los niños, Ruth transformó a la Lilli adulta en una adolescente, dando así a luz una nueva obra maestra: Barbie.
Con la ayuda del aclamado diseñador Jack Ryan y el legendario escultor Jack Taylor, Ruth Handler no escatimó gastos para perfeccionar su fascinante creación. Cada detalle delicado, desde la figura proporcional y el vibrante guardarropa de Barbie hasta su expresión facial sorprendentemente cautivadora, fue meticulosamente elaborado para personificar el epítome de la elegancia, la gracia y las posibilidades ilimitadas.
En 1959, Barbie, nombrada así en honor a la hija de Ruth Handler, Barbara, hizo su gran debut en la Feria Internacional del Juguete de Estados Unidos en la ciudad de Nueva York. Ataviada con un traje de baño de rayas de cebra en blanco y negro vanguardista y tacones altos, Barbie causó sensación en el mundo. Sin que Ruth lo supiera, había dado paso a un fenómeno cultural que capturaría los corazones y mentes de niños y coleccionistas en generaciones por venir.
Barbie rápidamente se convirtió en un ícono de empoderamiento y se hizo sinónimo de la perseverancia y ambición de las mujeres alrededor del mundo. A través de su impresionante variedad de profesiones, desde astronauta hasta cirujana, Barbie quebrantó sin esfuerzo las normas sociales, inspirando a innumerables niñas a soñar sin miedo y perseguir sus aspiraciones sin limitaciones.
Gracias al talento de su creatividad y su inquebrantable creencia en el potencial del juego, Ruth Handler grabó su nombre de manera indeleble en la historia como la visionaria que creó a Barbie, revolucionando para siempre el mundo de los juguetes y encendiendo la imaginación de niños de todo el mundo. Su compromiso inquebrantable con la innovación y su determinación para empoderar a las jóvenes mentes son un testimonio de su legado duradero, convirtiendo a Ruth Handler en una verdadera pionera de su tiempo.