Este 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medioambiente, pero lejos de ser una fecha para festejar, es un día para analizar los problemas que la humanidad ha generado en el planeta con el medio ambiente. La Organización de Naciones Unidas (ONU) advirtió que la salud del planeta sigue deteriorándose a pasos agigantados con más 3000 millones de personas afectadas por la degradación de los ecosistemas, con elevadas tasas de contaminación que causan unos nueve millones de muertes prematuras cada año y más de un millón de especies de plantas y animales están en peligro de extinción.
Esta fue una de las advertencias del Secretario General de la ONU en su mensaje por el Día Mundial del Medioambiente, que se celebra este domingo, y en el que el titular de la ONU recordó otras amenazas que penden sobre todas las personas.
“Cerca de la mitad de la humanidad ya vive en zonas de peligro climático, por lo que tiene 15 veces más probabilidades de morir a raíz de efectos del clima como el calor extremo, las inundaciones o la sequía”, destacó António Guterres.
Y en clave climática añadió que “hay un 50 % de posibilidades de que las temperaturas mundiales medias anuales superen en los próximos cinco años el límite de 1,5 °C fijado por el Acuerdo de París. Para 2050 podrían verse desplazadas más de 200 millones de personas por la disrupción climática”.
Ante esta situación, señaló que ha llegado un momento en el que “no podemos desoír las alarmas que se intensifican día tras día” y emplazó a los gobiernos a “priorizar urgentemente la acción climática y la protección ambiental mediante decisiones de política que promuevan el progreso sostenible”.
Para conseguirlo enumeró cinco recomendaciones que servirían para acelerar la implantación de energías renovables en todo el mundo, “como poner las tecnologías renovables y las materias primas a disposición de todos, reducir la burocracia, reorientar las subvenciones y triplicar la inversión”.