27 de marzo del 2020.- Tras el rumor de que curaba el coronavirus, aumentado por una declaración de Donald Trump, es casi imposible encontrar en México un medicamento del que no pueden prescindir quienes verdaderamente lo necesitan
Pacientes de lupus en México no consiguen la medicina que les ayuda a controlar su enfermedad luego de que se agotara tras un rumor de que ayudaba a curar el Covid-19.
El 19 de marzo el presidente de Estados Unidos Donald Trump dijo que la hidroxicloroquina, medicamento para atacar el lupus, ayudaría en el tratamiento del Covid-19. Esto luego de que el médico francés Didier Raoult publicó un artículo que se difundió en redes asegurando que al administrarla a 25 pacientes de este coronavirus habían reaccionado de manera positiva.
Al día siguiente el director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos, Anthony Fauci, dijo al diario estadounidense The New York Times que solo había evidencia anecdótica de que los medicamentos pudieran ser efectivos ante la pandemia, pero a Trump no le importó y el 21 de marzo tuiteó que la hidroxicloroquina en conjunto con la azitromicina (antibiótico) cambiarían la historia de la medicina y urgió a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) a usarlos lo antes posible.
En varios países, entre ellos México, la gente corrió a comprarlo.
El plaquenil, nombre comercial de la hidroxicloroquina, es un medicamento creado para el tratamiento de la malaria que más tarde comenzó a usarse para las enfermedades autoinmunitarias como el lupus y que hasta antes de esta semana no era muy demandado en las farmacias.
Mariana Torres Trueba tiene 26 años y desde los 11 fue diagnosticada con lupus, una enfermedad autoinmune que ocasiona que los anticuerpos de una persona ataquen órganos o tejidos, lo que sin un tratamiento adecuado puede causar daños irreversibles en riñones, pulmones, corazón o vasos sanguíneos, pero que si se detecta a tiempo es controlable.
Torres Trueba toma una pastilla de 200 miligramos de plaquenil todos los días. Los médicos le han dicho que así será de por vida. No puede quedarse sin el medicamento.
“Salió la noticia y cuando vi la medicina dije ‘ay, qué chistoso, es la medicina que yo tomo para el lupus’ (…) no pasaron ni dos horas que le hablé a mi mamá y le dije que checara en las farmacias. Para esto el plaquenil se vende sin receta, nunca en 15 años me han pedido receta, entonces mi mamá me dijo ‘no, de hecho empecé a marcar y ya no hay en ninguna farmacia”, contó desde España donde está varada.
Esta información fue publicada originalmente por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad.