México, Cuba y Chile unen su canto por América

Más de 300 personas vivieron el encuentro musical de Leticia Servín, Los Hermanos Arango y Manuel García.

Con un llamado a la paz y a la unión de los pueblos americanos para la construcción de una sociedad más humana, se presentaron ante más de 300 personas en el Teatro Matamoros de Morelia, Manuel García, Los Hermanos Arango, y Leticia Servín.

En una entusiasta colaboración entre diversas dependencias gubernamentales embajadoras del arte y la cultura, se realizó el Festival Músicas de Nuestra América, donde las y los artistas de Chile, Cuba y México dieron muestra del canto que une y mantiene viva la memoria latinoamericana.

La titular de la Secretaría de Cultura, Tamara Sosa Alanís, resaltó la importancia de estrechar lazos culturales con países hermanos, a través del talento de sus artistas y la riqueza musical como la que se vivió en el corazón de la ciudad con géneros como la trova, el folklor cubano, y el jazz.

Manuel García en concierto

En el festín sonoro, la secretaria de Educación, Gabriela Molina, celebró que sea la música un punto de encuentro y de diálogo que nos lleve a la reflexión y la acción para hacer del entorno, un mejor espacio de convivencia.

Los Hermanos Arango iniciaron con una demostración espectacular en la que combinaron voz, armonía y una gama completa de percusiones africanas tradicionales, explorando ritmos con raíces de este continente que han evolucionado en Cuba, como la yoruba, bantú, carabalí y la rumba.

La cantautora mexicana, compositora, conductora, productora y directora musical, Leticia Servín, siguió con versos el escenario, en admiración al trabajo musical de Los Arango y Manuel García, para luego dar paso a los éxitos que han marcado su trayectoria musical y su más reciente álbum Colibrí, semilla querida.

El cantautor Manuel García, una de las voces más importantes de las últimas décadas en Chile, cerró con broche de oro este emotivo encuentro con el sonido característico de su guitarra y su dialogar poético de trova y rock.

Con guitarras de Paracho, un homenaje a Silvio Rodríguez, Víctor Jara, así como la sorpresiva invitación de la familia Mejía, Manuel García dejó su canto en el corazón de los michoacanos.