El Día Internacional Contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia conmemora la lucha por los derechos de la comunidad LGBT+
Morelia, Michoacán, a 17 de mayo del 2021.- El Día Internacional Contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia conmemora la lucha por los derechos de la comunidad LGBT+. Y es que los prejuicios y la persecución en contra de las personas que no encajan en el paradigma sexual del patriarcado ha estado presente desde la aparición del mismo. Esto si bien, en diferentes etapas de la historia, esos prejuicios y esa persecución han variado en intensidad.
El Día Internacional Contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia se conmemora cada 17 de mayo por un motivo específico. Así, fue en 1990 cuando la Asamblea Mundial de la Salud aprobó la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas de Salud Relacionados. La cual, a partir de ese momento, dejó de enumerar a la homosexualidad como una enfermedad mental.
Lo anterior hace notar que los prejuicios y la persecución en contra de la comunidad LGBT+ han querido ser justificados de más de una forma. Así, o se decía que la homosexualidad era un pecado, o se decía que era un delito o, de plano, un estado de locura. Pero esto ha ido cambiando para bien con el paso de los siglos. Si bien no con la celeridad deseada.
Reconocimiento a los derechos de la comunidad LGBT+
Hoy día cada vez son más los países que ya no persiguen a la comunidad LGBT+. Esto tachándolos de enfermos mentales necesitados de tratamiento psiquiátrico, de delincuentes o de pecadores. De esta forma, ya incluso se llega a admitir el matrimonio igualitario, es decir, entre personas del mismo sexo. Así como la emisión de documentos que certifican el cambio de identidad, de masculino a femenino o viceversa. E incluso, en este mismo año, en el Estado de Puebla se aprobó la llamada Ley Agnes (en honor a la activista Agnes Torres). La cual reconoce los derechos de las personas trans.
Y sin embargo, los crímenes de odio en contra de la comunidad LGBT+ siguen estando presentes. Así como las denominadas terapias de conversión. Las cuales siguen considerando a la homosexualidad como un problema mental. Por este motivo, en la Ciudad de México y en Alemania se les considera ya un delito semejante a la tortura. Con todo, la lucha por los derechos de las personas que aman diferente continúa.