Desde hace al menos dos años, los vehículos de la benemérita institución terminan su turno en un mismo sitio: llenando el tanque en Río de la Plata y Circuito Interior, donde se ubica la estación propiedad de Fernando Suinaga Cárdenas, quien preside la Cruz Roja desde 2012, y quien canceló una entrevista donde se le pedirían explicaciones sobre cómo, por qué y en qué términos se tomó la decisión de que su negocio vendiera el combustible a las ambulancias.
Todos los días, vehículos y ambulancias de la Cruz Roja Mexicana acuden a cargar combustible en la estación PL/6857/Exp/ES/2015, que es propiedad del presidente del Consejo Nacional de esa organización, Fernando Suinaga Cárdenas.
Ubicada en la calle Río de la Plata esquina con Circuito Interior en la capital del país, la gasolinería es el punto donde el parque vehicular de la Cruz Roja se abastece luego de terminar cada turno.
Desde el pasado 25 de febrero, MCCI -de acuerdo con un texto de Daniel Melchor– registró que entre las 12:00 y 15:00, y las 20:30 horas, ambulancias, camionetas y automóviles de la institución llegan a este sitio, en donde tienen asignadas las bombas cinco y seis.
La estación es operada a través de la razón social Servicio Río de la Plata S.A. de C.V., misma que fue constituida en julio de 1998 por Pablo José Miguel Suinaga Cárdenas y Fernando Suinaga Cárdenas, presidente de la Cruz Roja Mexicana desde junio de 2012.
De acuerdo con paramédicos consultados, las reglas de operación indican que cada vez que termina un turno, los operadores de las ambulancias están obligados a dejar el tanque lleno, y por cada turno llegan seis unidades a cargar gasolina.
Desde hace al menos dos años utilizan esta gasolinera para recargar las unidades. Antes, el parque vehicular cargaba en la estación ubicada en Blvd. Miguel de Cervantes y calle Presa Don Martín, en la colonia Irrigación, a menos de 500 metros de las instalaciones de la Cruz Roja.
Actualmente, cada vez que las ambulancias terminan turno tienen que recorrer más de 5 kilómetros, desde la gasolinería en la colonia Cuauhtémoc hasta la sede nacional, en colonia Polanco.
MCCI solicitó entrevista con el presidente de la institución, Fernando Suinaga, la cual desde abril se pactó para el lunes 13 de mayo. Sin embargo, a último momento y alegando motivos laborales, Suinaga no se presentó, y en su lugar asistió el director general de la Cruz Roja Mexicana, José Antonio Monroy Zermeño.
A la pregunta expresa de por qué se compra combustible para vehículos institucionales en la gasolinería del presidente de la Cruz Roja, Monroy explicó que las unidades comenzaron a cargar en esta estación luego de que se terminaron las donaciones de Pemex en 2016, motivo por el cual el presidente de la institución ofreció su propia gasolinería.
Generalmente, para contratar un proveedor las autoridades de la Cruz Roja Mexicana realizan una cotización. No obstante, reconoció Monroy, eso no sucedió con la gasolinería de Suinaga.
“Teníamos donativos hasta que lo agotamos. Cuando nos detuvimos por falta de pago, una de las ofertas de nuestro presidente fue ofrecer el crédito”, argumentó.
Al ser cuestionado sobre si no advirtieron la posibilidad de un conflicto de interés, Monroy dijo: “obviamente, como dices, se presenta esa figura del conflicto (de interés), pero si no hay opción, hay que apoyarnos de nuestra propia gente”, justificó Monroy Zermeño.
Dado que en ocasiones la Cruz Roja no tiene la solvencia para pagar el combustible, el director general señaló que incluso “le causamos problemas a veces, porque retrasamos el pago”.
El director general dijo que no todos los vehículos cargan combustible en ese sitio, sin embargo, consideró que el presunto beneficio para la Cruz Roja es el financiamiento.
Durante la entrevista se solicitaron documentos y cifras sobre cómo se oficializó al interior de la institución la decisión de comprar en la gasolinera del presidente, sobre a cuánto asciende lo que se compra en combustible y cómo opera el presunto financiamiento del mismo, pero el representante de Suinaga dijo desconocer en ese momento los datos.
En un reporte enviado dos días después de la entrevista, la institución dio a conocer que desde 2016 hasta 2019, la Cruz Roja Mexicana ha pagado 5 millones 964 mil pesos a la gasolinería de su propio presidente.
También confirmaron que Suinaga no realiza donaciones de combustible en su estación, sino que el único beneficio reside en una línea de crédito abierta y facilidades de pago en situaciones de emergencia, pero no se dieron detalles del mismo.
De acuerdo con Monroy, si bien no están obligados por ley a transparentar los recursos dado que son una institución de asistencia privada, cualquier pregunta que se les haga por los correos institucionales están dispuestos a contestarla.
“Constantemente estamos siendo monitoreados por diferentes instancias. Tenemos supervisión de la Federación (Internacional de la Cruz Roja), también informamos al SAT, y pertenecemos a la Junta de Asistencia Privada, son quienes revisan minuciosamente. También estamos publicando constantemente (en el sitio web) todo lo que hacemos”, explicó.
MCCI realizó diversas solicitudes a la Junta de Asistencia Privada para acceder a los donativos y el manejo de las cuentas de la Cruz Roja Mexicana, sin embargo, la JAP reservó la información como confidencial y entregó documentos completamente censurados.
Fernando Suinaga, presidente nacional desde 2012, ha permanecido en este puesto durante dos trienios, y actualmente se encuentra en un tercer periodo, extraordinario, que fue autorizado por el Consejo Nacional de la Cruz Roja Mexicana.
Desde el 20 de marzo hasta el próximo 31 de mayo, la Cruz Roja realiza la colecta nacional con la que esperan recaudar alrededor de 360 millones de pesos.